2001 Enero
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- La paz, agazapada bajo el vendaval de las piedras
La Paz, se hace con enemigos de carne y hueso, fogozos e insoportables enemigos con curriculum sabido y dientes feroces a ojos vistas. Pero las guerras se hacen, habitualmente, con enemigos anónimos, con masas humanas despersonalizadas en las cuales la "diplomacia" es unir pueblos contra el mismo enemigo y los mensajes son de plomo y dinamita. Un canto en prosa a una paz lejana - La 'Nakba' permanente
Los palestinos han ganado ya la importante batalla por la opinión pública internacional y el endurecimiento de la actitud de los países árabes para con Israel. El precio, sin embargo, puede haber sido demasiado caro. Luego de los logros obtenidos a raíz del cambio estratégico de la OLP de terrorismo por diplomacia, volver al camino de la violencia puede condenar al pueblo palestino a una tragedia permanente - El 10 del mes Tevet
Una de las conmemoraciones menos conocidas en el calendario hebreo, a menos que se sea obserbante, es la del Ayuno del Diez de Tevet. El mismo marcó el comienzo del fin para la historia del Primer Estado que tuvo el pueblo judío, pues en esa fecha decidió el rey babilónico Nabucodonosor poner sitio definitivo a Jerusalem. La destrucción del Primer Templo, aquel construido por el Rey Salomón, se acercaba inexorablemente - Los chicos de la guerra
El drama de la Intifada de Al-Aqsa, como de cualquier conflicto armado, es la utilización cínica de los niños y su colocación en la línea de fuego, en clara violación de la Convención de Ginebra. Las muertes de niños en el presente conflicto son de lamentar y condenar, sin atenuantes. También su sufrimiento en general, socio-económico como psicológico. Lo que no es unívoco es la responsabilidad por tal sufrimiento y por tales muertes - La "Fuerza Excesiva" del Ejercito Israelí
Para juzgar equitativamente el uso de la violencia por parte de las fuerzas de seguridad israelíes en la presente "Intifada de Al-Aqsa", deben usarse criterios internacionales ecuánimes. Y no es necesario observar a nuestros vecinos árabes, cuyos gobernantes no han dudado en borrar en pocas horas a miles de sus propios ciudadanos de la faz de la tierra cuando vieron peligrar sus regímenes. También comparados con países avanzados -en tiempos de guerra- los israelíes terminan por ser los más moderados. Aunque ello no convenga al rating de la CNN - ¿Es bueno para los judíos? (O la pregunta original de siempre)
Se acaba para Israel la era de un presidente "user friendly" en la Casa Blanca, allá en Washington. Eso no significa que todo esté perdido ni mucho menos para los intereses israelíes. La amistad con su aliado más importante, Estados Unidos, nunca bajará de cierto mínimo común denominador. Pero las relaciones serán más distantes con una administración que buscará remarcar su influencia en el Medio Oriente petrolero y, sobre todo, mucho silencio de radio. Tal vez sean ésas, precisamente, buenas noticias para el proceso de paz - La gran hora del odio y el terror
Israel se despierta cada día a una nueva realidad. La violencia sigue su escalada no sólo cobrando víctimas humanas, sino acabando con la cordura de uno y otro lado. No queda claro cuál es el fin estratégico de los palestinos, a no ser que se trate de una lucha inter facciones por heredar el liderazgo de Arafat, cuando el estado palestino con Jerusalem como su capital estaba al alcance de la mano. Barak y Arafat están perdiendo las riendas. Sus reemplazantes son de temer. - Rey David: Gloriosa inconsistencia del espíritu humano
La mejor herencia que nos deja la Biblia es su profunda comprensión del alma humana. Uno de los ejemplos más perfectos de ello es David, uno de los personajes más glorificados de la historia del pueblo judío. A pesar de sus yerros y sus pecados, de los que el relato bíblico perdona algunos y condena otros, David es glorificado en toda su fortaleza y debilidad, al punto que, según la tradición, el Mesías será su descendiente - Los judíos y Jerusalem
Si Jerusalem es sagrada para tres religiones, se pregunta Don Confuso algo malhumorado ¿por qué debe gobernar en ella el judaísmo en exclusividad?. Parece tener razón en su reclamo. Parece. La verdad es que no solamente el judaísmo no debe gobernar, sino que de hecho no gobierna. No es el rabinato ni la Jevra Kadisha quienes administran la ciudad; es el estado del pueblo judío. La demanda judaica para con Jerusalem no es religiosa: es nacional - Los árabes de Israel - Segunda Parte
Una vez reencontrados con sus pares palestinos en los territorios, luego de la Guerra de los Seis Días, los árabes israelíes comenzaron un proceso de lentas mejoras económicas y de reconfiguración de su identidad, lidiando con una "doble marginalidad". Por un lado, desigualdad respecto de la sociedad israelí y, por otro, no aceptación en el plano nacional palestino. Pero desde entonces, mucha agua ha corrido bajo el puente. - La Intifada de Al-Aqsa y la concepción judía de "El Otro"
Al enfrentarnos en una guerra volvemos a medirnos con nuestra capacidad de aceptar al otro, aun cuando ese otro no esté precisamente ansioso por aceptarnos. En el judaísmo la sabiduría al respecto es vasta, y se puede aprender de ella yendo justamente al archienemigo de Israel a lo largo de la historia: Amalek. Nuestra profe de historia, aun en los momentos más difíciles, no deja de sorprendernos